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Soy una chica muy normal, como cualquier otra que siempre veía programas de moda en la tele mientras se preparaba para ir a clase. Me encantaba ver desfiles de moda mientras imaginaba como sería ese mundo tan inalcanzable.
No sabía que ese mundo se convertiría en mi mundo algún día. Estoy feliz de haberme dejado guiar por mi corazón al haber dejado a un lado mi trabajo en la industria farmacéutica para poder hacer lo que hago hoy. Estoy muy ilusionada por estar trabajando con algunas de las mejores marcas de moda del mundo, este trabajo me hace verdaderamente feliz.
Para nada. Ni siquiera pensé jamás que algo así pudiera ser una opción. Me fascina poder mirar hacia atrás y ver el recorrido, pero sé que muchas cosas han ocurrido de forma natural, sin un plan u objetivo, sólo con mucho amor y pasión. Sé que puede sonar un poco cursi, pero es la verdad. Cuando algo lo haces desde el corazón, nada puede salir mal.
Sí, lo hago, y me encanta. No disfrutaría de este trabajo si otra persona lo hiciera por mí.
Hace mucho tiempo, cuando apenas tenía 3 años, cada vez que mi madre me compraba ropa nueva solía hacer un “desfile de moda” para toda mi familia. Me encantaba la ropa y esto ha definido la manera de sentirme desde que tenía 3 años.
Clásico con un toque atrevido. Me gusta mantener siempre un estilo muy femenino, pero también me gusta añadir un toque andrógino moderno a mis looks.
Cualquier cosa, la arquitectura, las revistas, Instagram, Lookbooks, paletas de colores… La verdad es que también es según mi estado de ánimo. Cuando estoy enamorada soy totalmente distinta.
La verdad es que no. Sin embargo me encantaba ver el estilo sencillo y natural de Carolyn Bessette-Kennedy y el de algunas modelos cuando no están sobre la pasarela.
Deportivas, botas militares y una americana estilosa.
Me encantan los tacones cuadrados, sientan siempre fenomenal y me recuerdan a Sexo en Nueva York.
Unos pantalones negros de cuero.
Sandalias de tacón “block”, zuecos de tacón cuadrado y, por supuesto, un buen par de sandalias con atado al tobillo.
Destalonados de punta fina o botas moteras. ¡Me encantan!
Me siento muy sexy cuando llevo tacones, pero me encanta el calzado plano con un poquito de plataforma. Digamos que el punto intermedio sería el tacón chupete.
Intento no ponerme tacón alto más de dos días seguidos sin parar en Fashion Week. Intercalo mis looks con botas militares, sandalias, tacones y deportivas, así mis pies se recuperan mucho más rápido. Al principio no lo hacía bien y acababa teniendo ampollas, pero ahora comprendo lo importante que es ir alternando el tipo de calzado.
Me encanta lo fácil que resulta combinarlos con mis looks. Tienen un toque que los hace únicos, a la vez que resultan atemporales.
Mis bolsos son muy importantes para mí. Tengo más de 80 y tengo que decir que, sin ellos, combinar un look no resulta tan divertido. Una chica nunca tiene suficientes bolsos, bueno, por lo menos, yo :)